El humor incisivo de Joan Rivers pudo haber lastimado a más de una estrella pero detrás de sus divertidos e hirientes comentarios se escondía la realidad de nuestra sociedad.
Considerada una visionaria de la comedia, siempre adelante de su tiempo, Joan no temía tocar temas que podían ser demasiado controversiales y para comprobarlo solo hace falta ver el sketch que la actriz y presentadora hizo en 1967 para 'The Ed Sullivan Show'.
En él, una Rivers de 34 años hace reír a los espectadores con un monólogo sobre los dobles estándares a los que son sometidas las mujeres.
'Si una chica tiene 30 años y no esta casada, es una solterona,' afirma desde el estrado. 'Un hombre que no este casado a los 90, es un buen partido. Es completamente diferente.'
Rivers constantemente empujo los límites de la comedia y encontraba algo divertido donde parecía no haber. La verdadera distinción de Rivers es haber sido una de las primeras comediantes femeninas en ser impecablemente sucia y hablar sobre lo que significaba ser una mujer sin filtrar.
Considerada una visionaria de la comedia, siempre adelante de su tiempo, Joan no temía tocar temas que podían ser demasiado controversiales y para comprobarlo solo hace falta ver el sketch que la actriz y presentadora hizo en 1967 para 'The Ed Sullivan Show'.
En él, una Rivers de 34 años hace reír a los espectadores con un monólogo sobre los dobles estándares a los que son sometidas las mujeres.
'Si una chica tiene 30 años y no esta casada, es una solterona,' afirma desde el estrado. 'Un hombre que no este casado a los 90, es un buen partido. Es completamente diferente.'
Rivers constantemente empujo los límites de la comedia y encontraba algo divertido donde parecía no haber. La verdadera distinción de Rivers es haber sido una de las primeras comediantes femeninas en ser impecablemente sucia y hablar sobre lo que significaba ser una mujer sin filtrar.
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